domingo, 24 de abril de 2011

El odio

El odio lo guardo para los dictadores salvapatrias, para los asesinos de sueños, para los banqueros usureros, para los besabanderas. El odio para los torturadores con salario y vacaciones, para la CIA en mi América latina, para los creadores de exiliados, para los fabricantes de armas y fronteras. El odio para los reyes con palacios a mi cuenta, para las sotanas dictadoras de conciencias ajenas, para los siervos orgullosos de sus amos. El odio para el imperio, para los carceleros, para los vendecausas, para los comprotodo, para los traficantes de vidas. El odio para el sistema, la máquina, los quemalibros, el libre mercado. El odio para aquel presidente con casa blanca y sombrero tejano.

Para ti en cambio, princesa, la eterna indiferencia. Porque odiar es sentir…y no te siento ni a ti, ni a tu ausencia, ni a tu recuerdo áspero e incómodo en la memoria del alma.

PABLO GARCÍA-INÉS